Universidad Pedagógica Experimental Libertador
Instituto Pedagógico de Caracas
Departamento de Castellano, Literatura y Latín
Curso: Desarrollo del Lenguaje del Niño de 0 a 7 años
Especialidad: Educación Preescolar
Período Académico: 2007 II
Profesora: Angélica Silva
Instituto Pedagógico de Caracas
Departamento de Castellano, Literatura y Latín
Curso: Desarrollo del Lenguaje del Niño de 0 a 7 años
Especialidad: Educación Preescolar
Período Académico: 2007 II
Profesora: Angélica Silva
Nombre y Apellido: Jezenia Mena
Seccion: 006
Seccion: 006
La Comunicación Animal y Lenguaje Humano
(Texto de opinión)
Pensando en un tipo de comunicación distinta al del lenguaje humano algunos investigadores han ofrecido la posibilidad de preparar a ciertos animales a través de condicionamientos, para el aprendizaje de conductas lingüísticas. Sin embargo, todos hemos conocido la imposibilidad de estos animales de aprender y desarrollar el lenguaje humano. Si se entiende el lenguaje como un medio para comunicarnos y expresarnos entonces incluiré el estudio de los gestos y sonidos, para así establecer semejanzas y diferencias entre la comunicación animal y el lenguaje humano. Como todos sabemos el lenguaje es un medio de realización de signos orales y escritos con significado. En el mismo orden de ideas, se entiende por lenguaje cualquier procedimiento que emplea específicamente el hombre para comunicarse. Entonces antes estas preliminares ideas nos preguntamos ¿Poseen los animales un lenguaje como el de los seres humanos?
En primer lugar y como es sabido, los animales como seres vivos tienen entre ellos su propio medio de comunicación. Este medio puede emplear diversas señales tales como sonidos, olor, movimiento, etc. En ese sentido encontramos ya la primera diferencia, el lenguaje humano emplea códigos de comunicación más complejo tales como orales, gestuales y escritos. Un ejemplo contundente que diferencia y semeja a su vez la comunicación animal del comportamiento comunicacional humano puede encontrarse en caso de las abejas. Ellas al igual que el hombre, son representantes de una comunidad.Sabemos las abejas desarrollan un medio de comunicación a través de la danza. Estos insectos, al igual que el hombre poseen cinco sentidos y son capaces de ver, oír, palpar, gustar y oler. Pueden además guardar información (memoria) y comunicarla además a sus compañeras. La llamada danza de las abejas parece tener varias propiedades del lenguaje humano. Entre ellas el rito, que les permite intercambiar mensajes además del objetivo de comunicar algo que esta (fuente de alimento). Las abejas manejan y combinan dos códigos de comunicación: el tridimensional fuera de la colmena y el bidimensional dentro de ella. Sin embargo, la danza de las abejas, así como todas las formas de comunicación no humana estudiadas hasta ahora, son pobres si se comparan con el lenguaje verbal humano. Entre los animales los mensajes no pueden ser manipulados para "crear" una nueva clase de información; existen reglas establecidas genéticamente que guardan una relación directa con el hecho de que el hombre es biológicamente un animal más evolucionado.
En segundo lugar, la comunicación de las abejas tiene una limitante impensable en el lenguaje humano que es el factor ambiental. Las abejas no se comunican en la oscuridad. El ser humano usa su lengua traspasando las barreras de distancia y tiempo al inventar medios para comunicarse como el teléfono, los satélites, el internet, entre otros.
En tercer lugar, existe una amplia bibliografía sobre el sistema comunicativo de los primates. Estos animales utilizan gran cantidad de recursos no verbales para señalar estados emotivos. Por ejemplo, las señales posturales junto con el arqueo o tensión y movimientos sucesivos de la cola indican relajamiento. Los movimientos corporales señalan el estado de sumisión o agresividad de la especie. La expresión facial puede indicar amenaza, apaciguamiento o neutralidad. Pero hay que destacar en estos animales la característica vocalizadora del lenguaje doblemente articulado, aunque los animales puedan: gemir, bramar y gritar. No obstante, todo y cada una de estas vocalizaciones se producen en situaciones de reto, amenaza, abandono de una riña, alarma ante un peligro, localización de otros animales, encuentro con la pareja de la misma especie. Mientras que el ser humano con su lenguaje oral y escrito no sólo puede prevaricar con intención, pues el uso de estrategias como la ambigüedad y la redundancia hablan de esas características. Es decir, el lenguaje humano es semántico y retorico.
Finalmente, se puede afirmar que el lenguaje, tanto en su dimensión humana como animal, tiene en común un carácter sociobiológico que se observa en las distintas metodologías comunicacionales. Si se atiende al aspecto social se podría señalarse íntima relación que existe entre el lenguaje humano y la comunicación animal. Sin embargo, si hablamos de los sistemas o códigos comunicacionales y sus características biologicas sabemos que sólo el hombre desarrolla, acumula y transmite conocimientos de una generación a otra, y este hecho se vincula solo al ejercicio de un lenguaje fundamentado en la creatividad del ser humano y no en la comunicación animal.
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